El pasado 20 noviembre, vivimos un día de la música atípico. El silencio impuesto por la Covid-19 nos privó de vuestra compañía, de vuestra alegría, de la felicidad que nos hacéis sentir. Por eso, volver a escucharos significará recuperar esa normalidad añorada a la que tanto ansiamos volver. Sois parte de nuestra forma de ser, de vivir, de disfrutar de la vida. Sin vuestra banda sonora la magia que nos envuelve y nos hace especiales no existiría. Seríamos otra cosa, no sé el qué, pero seguramente más grises y menos alegres. Sois Mediterráneoen estado puro. Algarabía.
La implantación de las sociedades musicales en nuestra ciudad vertebra nuestra identidad como ciudad, como pueblo unido alrededor de un fenómeno cultural, artístico y educativo de primera magnitud que, además, actúa como elemento de cohesión social e integración. Es indudable la capacidad de una canción de unir a personas radicalmente diferentes en torno a un sentimiento.
Es inevitable pensar en València, en los valencianos y valencianas, y que una de las primeras imágenes que aparezcan sean las bandas. ¿Quién no tiene entre su círculo familiar o sus amistades, algún músico o música? Como dice el refrán “De músic, boig i poeta, tots en tenim una miqueta”. Como señaló el president de la Generalita, Ximo Puig, con motivo de Santa Cecilia: “La música es la tercera lengua de los valencianos y las valencianas, lo diga o no el Estatuto de Autonomía”.
Por eso, si 2021 serà el año en el que celebremos el centenario del nacimiento del director de cine José Luis García Berlanga, las bandas de música formaréis parte de las actividades que se organizarán en torno a su figura. “Yo de música no entiendo”. Esta era su carta de presentación ante los compositores de sus películas pero, tal y como escribe Juan Francisco Álvarez, sí supo trasladarles (a la mayoría) lo que quería. Así sucedió en 1952 cuando inmortalizó la música de banda que tanto amaba en una de sus películas más reconocidas, ¡Bienvenido Mister Marshall!
Porque de eso se trata, de amor y de vocación. Gracias a vuestro esfuerzo y constancia en 2018 conseguisteis la declaración de Bien de Interés Cultural y ahora se abre una nueva oportunidad de seguir creciendo y de reforzar vuestro reconocimiento. Tenemos que trabajar para que las Sociedades musicales de la Comunidad Valenciana sean declaradas Manifestación Representativa del Patrimonio Cultural Inmaterial en España.
Esta declaración permitirá el reconocimiento del patrimonio inmaterial de las sociedades musicales de la Comunitat Valenciana, algunas de ellas centenarias y bicentenarias, que representan más del 50% del conjunto de sociedades musicales españolas.
Es nuestra responsabilidad protegeros y ayudaros. Por tanto como nos enriquecéis, no podemos más que está a vuestro lado y atender vuestras necesidades en estos momentos, especialmente duros para todos y todas. Por eso tenemos que seguir colaborando con las bandas de música de manera muy estrecha desde el Ayuntamiento. Sois el movimiento asociativo más importante de la ciudad junto a las Fallas.
Solo tenemos que dirigir la mirada hacia el Cabanyal. En la calle Josep Benlliure se erige un edificio entrañable para quienes allí vivimos porque forma parte de nuestra identidad como Poblat Marítim. Si hay un hito de la anterior mandato del que me siento especialmente orgullosa es el devolver la vida al Casinet, el edificio donde se encuentra la Sociedad Musical Unión de Pescadores.
Gracias a la intervención que desarrollamos desde Urbanismo, una de las sociedades con más historia de nuestra ciudad, dispone ya unas instalaciones estables y seguras, con una sala de ensayos,aulas de enseñanza, sala polivalente de reunión, biblioteca y fonoteca, así como otros espacios que permiten a la sociedad desarrollar toda su actividad.
Y como de patrimonio se trata. ¿Qué mejor que recuperar estos edificios y que sea otro patrimonio el que lo llene de vida? Así nos encontramos con la Alquería Julià, donde Bankia ha rehabilitado esta inmueble para que se convierta en la Casa de la Música y sea la sede de laFederación de Sociedades Musicales de la Comunitat Valenciana. De la misma manera que en el Cabanyal, la recuperación de esta alquería y su vinculación a la música, redundará sin ninguna duda en beneficio para el barrio de Nou Moles y para la ciudad.
Esto es lo que sucede con el Certamen Internacional de Bandas de Música Ciudad de Valencia que lleva más de 100 añosdifundiendo nuestro patrimonio más importante alrededor del mundo. Aquel ‘Concurso Musical’ del XIX se ha convertido en uno de los certámenes de mayor prestigio y relevancia mundial. Uno de esos eventos que nos sitúan en el mapa de la cultura gracias vuestra capacidad de creación y vuestro talento, sin añadidos, ni florituras.
València, luz, color y música. Vuestra música es nuestra fuerza y nuestra esperanza. Tenemos que trabajar juntos y juntas para que podáis volver a inundar las calles y nuestras vidas de alegría.