La Societat Musical Nova d’Alcoi ha iniciado este domingo los actos de celebración de su 175 aniversario. La cita es sin duda una efemérides que merece una celebración por todo lo alto, por lo que en las semanas previas, una exposición e incluso la edición de un boleto conmemorativo en el sorteo de la ONCE ya habían anunciado la celebración.
Ahora, la música ha tomado el protagonismo para celebrar el aniversario en el Teatre Calderón de Alcoi, en un concierto especial con obras de compositores vinculados a la banda, y en que además la formación estrenó una nueva bandera.
La banda, dirigida por Juan Doménech Calaforra, abrió la primera parte del recital ante cientos de personas con el pasodoble “Altruismo y gratitud” de José Carbonell García, para seguir con la “Serenata Española” de José Espí Ulrich. A continuación tuvo lugar uno de los momentos más destacados de la audición, con la magistral interpretación de “La Venta de los Gatos”. La obra lleva la firma de Gonzalo Barrachina Sellés, quien fue músico y director de la Nova, y a quien los músicos rindieron un merecido homenaje con una interpretación de nivel. La pieza “Zambra gitana”, también de Sellés, puso fin a la primera parte del concierto.
El inicio de la segunda parte estuvo también marcado por un momento histórico, cuando Miguel Peidro, el músico más mayor de la Nova, cogió la bandera dque hasta el momento presidía el escenario, mientras Ariadna Vilaplana, la músico más joven de la banda, salía al escenario con la bandera nueva. Ambos recibieron una fuerte ovación en un acto cargado de simbolismo al que presidente de la Nova, José Antonio Llinares, se sumó anudando el corbatín conmemorativo del 175 aniversario. Con esta ceremonia, que se estrenó en noviembre de 1977, ha dicho adiós y en su lugar se ha colocado la nueva.
La música recuperó su filo con la interpretación de “Gitanerías” de Gonzalo Blanes Colomer; y con la pieza “L’Ull del Moro”, el cancionero sinfónico que escribió José María Valls Satorres para dedicarlo a la Música Nova en su 150 aniversario. La pieza volvía a sonar 25 años después, aunque con algunos cambios respecto al original, y en el marco de otro especial aniversario, algo que también fue agradecido por el público.
Con la marcha mora “Mahayuba” de Rafael Casasempere Juan se ponía fin la segunda parte de la actuación, aunque el concierto continuó con un bis en el que sonó la obra “Zambra gitana” después de la larga felicitación ofrecida por el público y como agradecimiento al apoyo recibido.
La Nova d’Alcoi abre así un año muy especial, cuya siguiente y la siguiente cita será el 5 de marzo en el Auditorio de la Diputación de Alicante (ADDA), donde la Nova volverá a interpretar parte de su patrimonio musical.