La 46ª edición del concierto “Mano a Mano” de Buñol, llega con “La Armónica” –los litros– y “La Artística” –los feos– en plena forma.
Buñol es una población que destaca por su singularidad, producto de una personalidad forjada en la combinación histórica de la actividad agraria de montaña y la inducida por la influencia de la industria, como la vieja cementera, por ejemplo. Es por lo tanto variopinta y diversa, con un amplio sentido social de sus gentes y, por lo tanto con una preeminencia de las opciones progresistas en su bagaje electoral.
Como lo es La Tomatina, el Mano a Mano es una propuesta muy especial, como son las actividades lúdico festivas de Buñol. Nacida la rivalidad musical entre dos grandes sociedades musicales, es de las pocas ciudades en que la competencia se sintetiza en una actuación conjunta, el Mano a Mano, donde se dirimen las diferencias y cada uno de los espectadores es el jurado de su propia opinión.
En realidad, no hay jurado ni premios. Sólo el prestigio y la reputación. En el escenario se compite desde la gloria y el trabajo bien hecho. Una vez acabada la “contienda” cada uno de los espectadores decide para sí mismo qué banda ha destacado sobre la otra. No hay nunca unanimidad. Esta es la esencia del Mano a Mano que, como todos los veranos, se celebra en Buñol, siempre como los mismos contendientes. Un duelo musical sin precedentes que en plenos calores de montaña divide en dos a la población, uniéndola, al fin y al cabo.
Como las grandes bandas de la Comunitat Valenciana tienen maestros repartidos en orquestas prestigiosas de España y del mundo; decenas de músicos que encontraron desde su formación en “La Artística” y “La Armónica” un camino profesional, no dudan en preparar sus vacaciones de verano acudiendo a Buñol, sí, para visitar a sus familiares y a amigos, pero sin duda para formar parte, también, de sus agrupaciones musicales y preparar con ahínco el Mano a Mano. Ensayan quitándole tiempo al sueño y al descanso, se involucran, y vuelcan todo su saber y su experiencia en acreditar esa noche, en el Auditorio de San Luis que tienen por orgullo pertenecer a una de las dos sociedades de prestigio mundial.