En cuanto a la música ha sido algo extraordinario. Si hace unos días pudimos comprobar a profesores que ejercían sus clases y explicaciones a través del sistema online, también hemos podido comprobar la fase más artística como los montajes de imágenes con programas informáticos que numerosas bandas de música y orquestas pudieron realizar.
Gracias a la tecnología se han podido realizar ensayos y conciertos para no perder el ritmo de trabajo. Todas estas reacciones reafirman que el arte cultural y en especial el musical ha logrado un gran avance, nunca la informática se había convertido en tan grande aliada para propagar el arte.
En esta ocasión, como ya hemos dicho, queremos poner como ejemplo los numeroso programas de montaje de imágenes. Estos han dado de sí hasta tal punto que hemos podido escuchar conciertos y seguir conectados con el público sin perder el feedback que esto produce.
Si seguimos las redes sociales podemos ver un gran número de creaciones, entre ellas particulares, unas de ellas las de Jorge Lorente Picó, profesor de flauta del Conservatorio de Sant Joan, el cual, nos ha contado una historia increíble que nos asegura con certeza el crecimiento de la nueva creatividad.
Este polifacético profesor ha sido capaz de crear su egoorquesta (por denominarla con una definición) y lo queremos poner de ejemplo por su singularidad y el laborioso trabajo que esto le ha conllevado. Este trabajo trata de autograbarse en más de 30 tomas diferentes combinando él mismo la interpretación de todas las especialidades instrumentísticas (cuerda, viento madera, viento metal y percusión), además de la oportunidad de dirigirse él mismo en el papel de director y utilizar al máximo la imaginación ayudándose con objetos para realizar ritmos como paquetes de clínex, rollos de papel o incluso cajas de caramelos.
Hemos quedados prendados de su trabajo y creemos que no solo es un reconocimiento hacia él, sino a la tecnología que ha sabido aplicar, volviendo a reincidir la gran importancia de esta etapa vírica que también ha tenido consecuencias positivas. Obras como “El Lago de los cisnes”, “La Misión”, “Titánic”… Marchas Moras y pasodobles como “Xabia”, “Un moble más “… incluso extendiéndose al estilo flamenco, los boleros ,estudios, anuncios publicitarios, nanas o música de videojuegos. Un buen detalle fue cuando llegaban las celebraciones en cada rincón de la Comunidad Valenciana a las que dedicaba sus específicas obras como las saetas en Semana Santa.
También hay que destacar el premio que recibió con la interpretación de “Amparito Roca” en cuya secuencia apareció junto a su madre a modo de colaboración, a la que halaga como su gran apoyo.
Jorge siempre ha sido muy entusiasta de este tipo de producciones, pero en este confinamiento que se podría definir como “avance positivo” en lo que a la tecnología se refiere, invirtió en tiempo y dinero para aprender y asesorarse de un mejor equipo de grabación que le permitió aportar este gran avance que ha enriquecido el mundo de la cultura
