Capella de Ministrers ha publicado Germanies, un disco en el que aborda músicas de guerra y de paz del Renacimiento y obras de diversos compositores europeos que conforman un trabajo que conmemora el 500 aniversario de la Guerra de las Germanías (1519-1523) que enfrentó a artesanos y una burguesía emergente contra la nobleza en los antiguos Reinos de Valencia y Mallorca y en algunos lugares de Cataluña.
El trabajo discográfico, que se distribuye en más de 28 países de todo el mundo y está presente en diversas plataformas, es el número 61 de una formación de música histórica de referencia con 33 años de presencia en el panorama internacional. La grabación incluye 12 temas y en ella Carles Magraner, director de Capella de Ministrers, incluye un repertorio de autores como Claude Gervaise, Cristóbal de Morales, Hans Leo Hassler, Mateo Flecha y Andrea Gabrieli, entre otros, recuperado en ciudades como Génova, Florencia, Venecia, Amberes, Praga, París, Lyon, Núremberg, Wolfenbüttel y Hamburgo. Carles Magraner, director de Capella de Ministrers, subraya que “estamos muy satisfechos con la recuperación en este disco de un importante repertorio estrechamente vinculado con el devenir de la Europa renacentista y que nos sirve para celebrar el 500 aniversario de la Guerra de las Germanías”. El violagambista y musicólogo destaca que “música, guerra e historia van de la mano en este trabajo que hace un periplo a través de obras representativas de una época que da paso a la Edad Moderna”.
Para este álbum, Magraner (dirección y viola da gamba) ha reunido a prestigiosos cantantes e intérpretes como Èlia Casanova (soprano), Hugo Bolívar (contratenor), Albert Riera, Víctor Sordo, Jesús Navarro e Ignacio Pérez (tenores), Pablo Acosta (barítono), Lixania Fernández, Jordi Comellas y Leonardo Luckert, (violas da gamba), Raquel Fernández (violone), David Antich (flautas), Núria Sanromà (cornetto), Silke G. Schulze (chirimía), Elies Hernàndis, Joan Marín, Álvaro Martínez y David García (sacabuches) Ovidi Giménez (bajón), Pau Ballester (percusión), Robert Cases (guitarra y tiorba) y Sara Águeda (arpa).
El disco se grabó los días 7, 8 y 9 de julio de 2019 en la iglesia del Monasterio de San Miguel de los Reyes de Valencia. La imagen de la portada del disco-libro es el Desfile de caballeros y soldados, fresco del Palacio de los Condes de Centelles de Oliva (Valencia – c. 1520), cortesía de la Hispanic Society of America de Nueva York; y la masterización del trabajo ha corrido a cargo del ingeniero de mezcla Jorge García Bastidas (dbc estudios).
Música y guerra
Javier Marín-López en colaboración con Virginia Sánchez-López (Universidad de Jaén), indican en las notas al programa que “música y guerra han estado asociadas desde tiempo inmemorial. Su relación puede rastrearse desde sencillos toques de trompeta y atabal interpretados por músicos militares en plena batalla para comunicarse e infundir valor (o temor) en los combatientes, hasta las más elaboradas piezas compuestas para la exaltación patriótica. En el ámbito religioso, el impacto de lo bélico ha sido igualmente destacable, revestido siempre de un tono sacro y moralizante”. Para estos expertos, “Capella de Ministrers explora parte del repertorio de corte bélico compuesto en Europa durante el ‘largo’ siglo XVI, un periodo en el que la cultura de las armas constituía una característica distintiva de la nobleza y la realeza, siendo parte fundamental de su formación”.
Batallas musicales
Marín-López y Sánchez-López señalan que algunas de las piezas “se vinculan con hechos asociados a las campañas militares de Carlos V”, y otras “constituyen verdaderas batallas musicales que representan los sonidos y el fragor de la guerra, simulando toques de tambores, disparos, fanfarrias y los típicos gritos de llamada a las armas (“al arma”, “valientes”, “fuego”, “batalla”, “guerra”, “victoria”)”. Y consideran que “todas ellas reflejan la tendencia de la época a expresar la identidad política por medio de la fuerza militar y la diversidad de estrategias técnicas empleadas para su musicalización”.
Vicent Josep Escartí (Universidad de Valencia) expone que “sabemos que la música sonaba acompañando las marchas de la infantería en las guerras europeas de aquella época, debía de ayudar a infundir valor a los hombres que sabían que arriesgaban la vida en cada combate”. Escartí pone de relieve que “la nobleza valenciana postagermanada sería aquella que cantaba y hacía sonar instrumentos felizmente en la corte del duque de Calabria, mientras el país se reponía de la guerra y perdía peso político en el conjunto de la monarquía hispánica”.
Primera globalización
Amadeo Serra (Universidad de Valencia) apunta que las Germanías fueron un conflicto que “algunos consideran una revuelta, otros se atreven a llamarlo revolución o simplemente movimiento social. Seguramente fueron el síntoma de los problemas y conflictos de una época, el Renacimiento, que coincide con la primera globalización tras haber alcanzado Extremo Oriente las naves portuguesas, y el giro de la monarquía hispánica hacia América”. Serra asegura que se reclamaba “un mejor gobierno de las ciudades, la reforma de los impuestos y la protección a los artesanos locales; de la monarquía se esperaba que abriera el poder municipal a los artesanos y pusiese freno a las cargas del régimen señorial”.
Las Germanías tuvieron cierto paralelismo con el levantamiento armado de los denominados comuneros, “al igual que ocurrió con la Guerra de las Comunidades (movimiento análogo a las Germanías desarrollado en Castilla entre 1520 y 1522), la rebelión de los agermanados fue sofocada y el poder absolutista del recién nombrado emperador Carlos I de España y V de Alemania salió reforzado”, indican en su artículo Marín-López y Sánchez-López.
Capella de Ministrers, que ha contado para el CD con la colaboración de la conselleria de Educación, Cultura y Deporte, Instituto Valenciano de Cultura, Universidad de Valencia, Fundación Cultural CdM y la Asociación Cultural Comes, trabaja desde hace más de tres décadas en la recuperación y difusión del patrimonio musical que ha rescatado y difundido en más de 1.500 conciertos y recogido en esmerados trabajos discográficos y en varias participaciones, recopilatorios y cds promocionales. Su labor investigadora se remonta hasta la Edad Media en la que ha abordado diferentes culturas. La formación obtuvo el prestigioso Premio Internacional de Música Clásica (ICMA) y el Premio Carles Santos en 2018, entre otros muchos galardones a lo largo de su historia.