El plantel de jóvenes músicos con los que cuenta la Comunitat Valenciana supone una fuente de riqueza cultural de la que sentirse orgulloso. No en vano, la red de escuelas de música que se extienden a lo largo y ancho de las comarcas valencianas, supone una oferta educativa única en el mundo en la que los niños y niñas que dan sus primeros pasos en la música se cuentan por miles cada año y que además, tienen en sus bandas de música, una oportunidad única de poner en práctica sus conocimientos y destrezas.
Sin embargo, a pesar de los grandes profesionales en la enseñanza musical con los que cuenta la Comunitat y a pesar de la gran calidad de sus conservatorios y centros de enseñanza, de entre estos miles de jóvenes intérpretes, son también muchos los que buscan alcanzar la perfección de su instrumento en el extranjero, viviendo una experiencia única que no solo les puede abrir las puertas a una carrera musical de primer nivel, sino que también contribuye a dar a conocer al mundo la gran calidad de los músicos valencianos.
Este es el caso por ejemplo de dos jóvenes valencianos que, tras dar sus primeros en las bandas de sus pueblos y con su instrumento debajo del brazo, se han decidido a llegar a Berlín, para asentarse en sendas formaciones musicales de gran prestigio, desde donde seguir sus prometedoras carreras.
Uno de ellos es Javier Sala Pla, natural de Castelló de la Ribera, que ha conseguido una plaza de academia como trompeta en la prestigiosa “Staatskapelle” de Berlín, es decir, la Orquesta Estatal de Berlín, una de las más antiguas de Europa, cuya historia se remonta hasta 1570. Se trata de una oportunidad única para el joven valenciano, que durante dos años no solo podrá forma parte de la orquesta como un miembro más, sino que además recibirá clases de los solistas de la formación para preparar las audiciones que dan acceso a los plazas fijas de trabajo. Pero el camino hasta aquí no ha sido fácil, y Javier Sala, que ya había recibido premios al mejor intérprete joven en distintos concursos, decidió trasladarse desde el conservatorio de Zaragoza a la Hochschule für Musik Hanns Eisler de Berlín, donde lleva dos años recibiendo clases. Este trabajo le ha servido para conseguir acceder a una beca a la que optaban otros 58 músicos de todo el mundo.
El mismo destino, el de Berlín, es el que ha recibido a otro joven músico valenciano lleno de talento, Xavier Biosca, que desde el pasado mes de noviembre persigue en la capital alemana su sueño de triunfar con su instrumento, en este caso, el fagot. Xavier Biosca dio sus primeros pasos en la música en la banda de su pueblo, La Primitiva de Rafelbunyol, desde donde continuó sus estudios en el reina Sofia de madrid. Biosca, no obstante, quiso seguir perfeccionando su estilo, por lo que se trasladó a Berlín para estudiar un Màster en Interpretació de Fagot en la a la Universidad Hanns Eisler. Su hazaña ha sido, no obstante, conseguir entrar a formar parte del exclusivo grupo de alumnos de la Filharmónica de Berlín, algo para lo que tuvo que superar unas exigentes pruebas con otros 40 fagotistas de todo el mundo. Se trata de una formación puesta en marcha hace 40 años por Herbert Von Karajan con el lema “Learn from de pross” y que se ha convertido en la mejor escuela para los futuros músicos de las mejores escuelas occidentales.
Se trata sin duda de una oportunidad única para dos músicos valencianos con mucho futuro que, tras iniciarse en la música en dos bandas valencianas, han puesto todo de su parte para convertirse en algunos de los mejores intérpretes de todo el mundo.