Las bandas de música están llamadas a jugar un papel determinante en el camino emprendido por las Fallas de Valencia para ser declaradas Patrimonio de la Humanidad, y que entra ahora en su recta final. Así lo anunció hace meses el alcalde de Valencia, Joan Ribó, en su entrevita para la nueva edición de la enciclopedia Las Badnas de Músicas de la Comunitat Valenciana, y así se demostró ayer después de la reunión mantenida entre la Junta Central Fallera y la Federación de Sociedades Musicales de la Comunitat Valenciana, que sirvió para trazar un camino conjunto que permita poner en valor la música fallera como un elemento prinicipal de la fiesta.
La intención de ambas entidades es firmar un convenio que permita poner en marcha un “Código de Buenas Prácticas” que se traduzca en una cooperación fluida entre las bandas de música y las comisiones falleras en aspectos como la organización de actividades lúdicas, jornadas informativas, o concursos de composición para fomentar la música fallera e investigación, entre otros temas.
Con este acercamiento se pretende poner en valor la música como un elemento central de las fallas, como también lo son la indumentaria o la pirotecnia, aspectos ambos recogidos en la candidatura de las Fallas a la UNESCO. Para ello, habrá que tener en cuenta algunos aspectos que en los últimos años habían quedado algo descuidados, como la promoción y creación de música fallera o la repetición de obras en algunos actos, un hecho que merma la riqueza musical de los mismos. «No se trataría de desechar las canciones de toda la vida, pero hay que ofrecer oportunidad a los jóvenes compositores e ir alternando los temas», según apuntoaron los representantes de las dos entidades.
En este sentido, en la reunión también se puso sobre la mesa la línea de ayudas que se pondrá en marcha a partir del próximo ejercicio para que las comisiones falleras contraten a sus bandas de música, en un intento por asegurar un mínimo de profesionalidad en la ambientación musical, algo que también había mermado en los útlimos años y que había sido puesto en cuestión por no pocos miembros del coléctivo de músicos.
El presidenten de la FSMCV, Pedro Rodríguez, remarcó que las Sociedades Musicales, además del trabajo artístico que se ve en la calle, realizan “una labor social a través de las bandas y las escuelas de música”, y añadió que por eso forman parte “del día a día de la sociedad, y de las Fallas, no solo en los días de las fiestas”. Por todo eso, la reunión sirvió para poner de manifiesto las ganas de trabajar codo con codo para hacer de las Fallas, una fiesta más grande si cabe, en el que la música juegue un papel determinante.
De hecho, la relación de la música de banda con las tradiciones festivas de toda la Comunitat Valenciana es un hecho que queda fuera de toda duda, por lo que desde las propias Bandas se busca articular mecanismos para asegurar unos mínimos estándares de calidad en sus actuaciones. De hecho, este “código de buenas prácticas” que se busca consensuar con el colectivo fallero se produce después del acuerdo alcanzado con la Associació de Sant Jordi d´Alcoi, que busca poner en valor la tradición musical festiva de la Comunitat Valencna.